Resumen
- ROFUS aumenta constantemente el número de jugadores autoexcluidos, lo que destaca la eficacia de la plataforma.
- En los últimos años, la autoexclusión ha aumentado, lo que sugiere que más personas no solo son conscientes de esta opción, sino que también reconocen la necesidad de ayuda para controlar sus hábitos de juego.
- Dinamarca avanza con campañas personalizadas destinadas a reducir los riesgos para los consumidores.
Contenido
Dinamarca ha alcanzado un logro significativo en su misión de proteger a los jugadores. El programa de autoexclusión ROFUS ha superado un nuevo hito, con más de 60.000 personas registradas. Esta herramienta está diseñada para mejorar la seguridad de los jugadores.
ROFUS alcanza el hito de 60.000 matriculaciones
La Autoridad Danesa del Juego creó el Registro de Jugadores Autoexcluidos para garantizar la seguridad de los jugadores y monitorear las tendencias del juego en el país. Según el sitio web oficial del organismo regulador, la mayoría de los registrados como autoexcluidos son hombres jóvenes. Celebrando este logro, el director de la Autoridad Danesa del Juego, Anders Dorph, expresó su satisfacción con el programa, lanzado en 2012, por el cumplimiento de sus objetivos. Afirmó: «Es gratificante que quienes necesitan autoexcluirse del juego utilicen ROFUS. Esto demuestra un creciente conocimiento de la herramienta y destaca su papel crucial en la lucha contra la ludopatía». Desde su creación en 2012, el programa ha aumentado constantemente su número de inscritos, con un fuerte aumento en los últimos años. En 2023, la autoridad anunció un hito de 40.000 inscritos, una cifra que ya ha superado los 60.000 en tan solo dos años. Este aumento de inscritos ha ayudado a identificar a los grupos más vulnerables a los problemas relacionados con el juego o con mayor probabilidad de inscribirse en el programa. Cabe destacar que el 58% de todos los inscritos son hombres menores de 40 años.
Dinamarca trabaja en enfoques personalizados para abordar los daños relacionados con el juego
Una tendencia emergente muestra que el 96% de las personas menores de 20 años que se registran son hombres. Los datos respaldan un patrón que hemos observado durante años: los hombres jóvenes son particularmente vulnerables a las conductas problemáticas con el juego. Por ello, nos centramos en educar a este grupo específico, incluso mediante presentaciones en instituciones educativas juveniles, declaró Dorph en respuesta a los hallazgos. Dinamarca trabaja activamente para proteger a los consumidores de los daños relacionados con el juego, implementando campañas dirigidas a personas de entre 18 y 24 años. Al mismo tiempo, el país está tomando medidas audaces para limitar la influencia de las operaciones de juego en el extranjero, logrando con éxito una tasa de canalización superior al 90%. A pesar de estos esfuerzos, tanto el regulador como Dorph reconocen que aún queda trabajo por hacer.